Buscando al espia perdido (libre)

Luego de su aventura en el bosque, decidió que por un tiempo debería de evitarlos, por más que Amara la naturaleza. Se debería limitar a estar en la metrópoli, con disfraz por supuesto para que no lo reconocieran. Eso era algo muy divertido y extraño. El común de la multitud no sabía quién era, y seguramente no habían escuchado ni su nombre, pero un par de nobles, y, eso marcaba la imperiosa necesidad de ocultarse.
Les parecería raro que anduviera por territorio de la gente común. Y era lógico. Pensarían que se traía algo entre manos, y en cierto punto estaban en lo cierto, se chocaría con uno de sus espías, que le exteriorizaría las cosas de otra manera.

Y por eso estaba ataviado con una capa de mediana calidad y extremadamente cómoda. Uno nunca podía saber cuando pasaría un noble o un caballero por las calles rodeado de su sequito, tras una ola de pompas y ceremonias. Mejor observar sin ser estar en la mira. Su soplón sabría reconocerlo, a veces parecía súbitamente como un fantasma

Los territorios bajos, lugar donde de chico había frecuentado, eran realmente interesantes, el mercado bullía de actividad. Había algunas cosas que quería conseguir. La mañana había terminado rápidamente poniendo los asuntos en orden y escuchado las audiencias sin interés pero con una máscara de cortesía y atención absoluta y luego su señor, que a veces se acordaba que él era un humano, le había dado la tarde libre. Era maravilloso poder despergarse un poco de los documentos aunque amara su trabajo.
Aunque estaba trabajando.

Miro los alrededores con disimulo y concentro su atención en un negocio que vendía armas. Su agente no aparecía. Le habría sucedido algo?